Reviews by fernando

Siegel haciendo sus pininos con un argumento artificioso, críemnes demasiado calculados, sin emoción. Solo hay detalles con gracia debidos a Greenstreet, Lorre y Coulouris. Buena Rosalind Ivan

Lautner/Audiard, policial tan simple y directo como mata el malo Quinquin, todos, hasta Dany Carrel mueren sin pena, es un decir, pues Gabin reacciona toda la película por su amigo Robert Dalvan...

Buenos primeros planos, Tognazzi siempre creíble, se desnuda la hipocresía de ambos bandos/clases pero la gravedad se vuelve insufrible y Romy no es la viuda del obrero de ninguna forma...

La cine e lontana, la ironía es pura Italia: un burgués provicniano decadente, un fiasco sentimental, se mete, por interés, de candidato socialista...

Lazos tan fuertes y tan endebles entre vecinos enamorados y celosos, al final casi todo se resuelve con una mudanza por trabajo, un Japón que en 1934 no presagia ninguna tormenta.

No hay pierde con Billy, ni siquiera porque se fue al Berlín destruido de posguerra. El detalle de Marlene tirando la llave a John Lund es como la brizna que nace entre las cenizas y, además, excelente comienzo y plano de ubicación y de setting the mood

Entro lo delicado y lo anodino, a pesar de que se juegan los romances de su vida. Kinuyo, buen actriz, es directora lavada y contenida, hasta le da un aroma a pastel pues usa de locación la turística Tara.

Soldati se divierte de verdad en este México visto a través de Hollywood y de las payasadas del más guapo de los payasos, Chiari. Secuencias largas de humor sostenido, para llegar a la mejor, la bronca agónica de Chiari y Gassman.

Toda la pela sobre los hombres de Miriam, con apoyo solidario de Winninger (el Frank Morgan de los pobres) y poco que hacer para McCrea. Más celeridad que chispa en ella.

Hasta antes del meloso happy end, una mezcla armónica de thriller de espionaje, ciencia ficción y drama triangular. Oxford se luce como locación.